Amada Reina y Señora, que prometiste en Fátima convertir a los pecadores y dar a la humanidad paz.
En reparación a tú Inmaculado Corazón por nuestros pecados y los pecados del mundo, prometemos
solemnemente.:
- Ofrecerte todos los sacrificios requeridos por mi deber diario.
- Rezar diariamente una parte del Santo Rosario( cinco misterios)
- Llevar el Escapulario de Carmen, como signo de consagración a tu Inmaculado Corazón
- Dedicarte de manera especial, como lo pediste, los primeros Sábados de mes.
Ayúdanos, Señora, a cumplir estas promesas. Amén.
Oración según indicación de Lucía.
(Extraída del manual y devocionario de NUESTRA SEÑORA DE FÁTIMA) |
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